Probamos la nueva Clase A de Mercedes-Benz
13/07/2018Después del cambio de la segunda a la tercera generación de la Clase A, éste pasó de ser un práctico y atractivo monovolumen del segmento B para convertirse en uno de los hatchback más agresivos y deseados del panorama automovilístico del momento.
La nueva generación, que se presenta seis años más tarde del cambio conceptual de la Clase A, se sitúa, sin duda alguna, como la referencia en un segmento competitivo como pocos. Lo hace, además, superando con creces las altas expectativas que nos generó la anterior generación. Una anterior generación que se convirtió en un auténtico superventas para Mercedes-Benz y que significó un auténtico soplo de aire fresco en la categoría de compactos premium.
La cuarta generación de la Clase A, como ya hizo la tercera generación en su momento, se ha situado como el hatchback premium de referencia, gracias en gran parte al gran arsenal tecnológico que puede equipar, entre los que se encuentran el nuevo sistema de infoentretenimiento MBUX (Mercedes-Benz User Experience). Un sistema innovador de Mercedes-Benz que introduce, por primera vez en su segmento, la inteligencia artificial.
La inteligencia artificial del sistema MBUX supone un gran paso adelante en cuanto a facilidad de uso del automóvil. Atrás quedaron los comandos de voz con diferentes palabras clave y en los que se tenía que vocalizar de manera sobrenatural: el nuevo sistema de inteligencia artificial de MBUX consigue que, hablando de una forma natural i después de pronunciar “Hey Mercedes” el vehículo realice diferentes funciones con sólo el uso de la voz. Funciones como subir o bajar la temperatura del climatizador, abrir o cerrar el techo panorámico o cambiar el color de la iluminación ambiental, entre otras muchas funciones.
La conectividad de la Clase A no acaba con el sistema de inteligencia artificial; cuenta, también y por primera vez en la Clase A, con dos pantallas (disponibles de manera opcional) de 10,25 pulgadas (displays de 7 pulgadas de serie). Dos pantallas que se pueden configurar al gusto del conductor mediante dos selectores que se encuentran situadas en el volante. El selector de la izquierda sirve para accionar la pantalla de 10,25 pulgadas del conductor, mientras que a través del selector derecho se puede gestionar la pantalla central.
La Clase A está disponible actualmente en dos versiones: una gasolina, el A 200 y un diésel, el A 180d, con potencias de 163 CV y 116 CV respectivamente (próximamente llegará una versión gasolina A 250 4MATIC con 224 CV de potencia).
Mercedes-Benz Clase A 180d (ficha técnica)
- Potencia: 116 CV
- Par máximo: 260 Nm
- Consumo mixto: 4,2 l/100km (combinado según NEDC)
A nivel de espacio, gracias a una mayor distancia entre ejes y a un crecimiento de prácticamente todas las cotas (120 mm más largo, 16 más ancho y 6 más alto) respecto la generación anterior, la nueva Clase A ofrece una vida a bordo notablemente mejor, con unas plazas traseras que aumentan, respecto la tercera generación, nada más y nada menos que 22 mm para los hombros, 36 mm para los codos y 8 mm respecto al techo.
Otro de los puntos donde más destaca la nueva Clase A sobre sus competidores es en materia de seguridad; especialmente si hablamos de asistentes a la conducción, donde sistemas como el Asistente activo de distancia DISTRONIC, el Asistente activo de velocidad límite o el Asistente de maniobra evasiva brillan por su efectividad y sencillez de uso.
En definitiva, la nueva Clase A cuenta con un auténtico arsenal tecnológico y un confort de marcha notablemente mejorado respecto la anterior generación sin perder un ápice de deportividad.
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